Tradicionalmente, los acabados sobre algunos tipos de granito, mármoles y piedras calizas se aplicaban golpeando repetidamente con una bujarda que labraba la superficie de la piedra. Es lo que conocemos como la técnica del abujardado para marmolistas. Las bujardas para piedra tienen un número de dientes que puntean la piedra hasta que ésta alcanza una textura rugosa, con pequeños agujeros o cráteres repartidos uniformemente sobre la misma.
BOCAS DE BUJARDAR Y PLATOS DE ABUJARDAR. Aptos para abujardar mármol, granito, caliza y hormigón.
BAILARINES DE MANO Y DE MÁQUINA.
Se puede abujardar de manera manual, utilizando una maza porta bujardas o a máquina con patos de abujardar que se colocan en una máquina radial portátil.